13/4/13

Repúblicas


El Aniversario de la II República española es un hecho democrático que en 1931 abrió un proceso revolucionario. La libertad política de soberanía republicana se combinó con la cuestión agraria, la social obrera industrial y la nacional.
La derrota republicana en 1939 a manos de la dictadura franquista, provocó una profunda involución y sufrimiento. La transición de la dictadura a la monarquía constitucional aplazó las grandes cuestiones pero no las resolvió.
El legado es un Estado monárquico de restauración borbónica con régimen electoral bipartidista, una industrialización raquítica de baja productividad y alto índice de paro, una capa financiera parásita bien asentada en el libre mercado de la propiedad privada, una crisis destructora con gobiernos y políticas incapaces de beneficiar a la mayoría social, unas naciones que no quieren compartir el mismo Estado que chupa la sangre a la gente trabajadora y a cada pueblo.
La defensa de la soberanía republicana, del avance social y de la libertad nacional que hacemos desde Cataluña, necesita asumir la memoria histórica y las lecciones de los éxitos y de las carencias republicanas. Sobre todo combatir el poder económico dominante con su expresión estatal y monárquica.
El promover una 3ª República en España, lo tenemos que combinar en Cataluña insertando la concepción soberana republicana en los procesos de movimiento y conciencia catalana concretos. Una conciencia que se reparte entre el hecho social y el hecho nacional, aun siendo dimensiones diferentes.
La República hoy la debemos explicitar en términos políticos en diversos procesos constituyentes español, catalán, vasco y gallego. República en Cataluña significa Repúblicas y República catalana, Federación de Repúblicas. Soberanía republicana catalana, con las confluencias y relaciones federales, confederales, o las que sea necesario y se decidan por parte de la ciudadanía.
La tarea vital concreta es realizar la Consulta para decidir y convertirla en vinculante. Una Cataluña libre y social no puede ser una declaración unilateral del estamento político o de un Parlamento, sino la obra constituyente de todo un pueblo, incorporando a fuego la causa y demandas sociales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario