Una concepción democrática plurinacional federal tiene raíces limitadas y parciales, además denostada en la política y ajena en el ordenamiento jurídico constitucional español.
Nos hemos de remontar a la tentativa democrática de relaciones entre los pueblos con aspiración nacional del presidente de la I República, Pi i Margall. Encontramos elementos en los programas de ciertas organizaciones políticas democráticas y de la izquierda trabajadora, con una apuesta clara en el programa de IU, o en las organizaciones burguesas nacionales supeditadas.
La concepción del derecho democrático a la autodeterminación en el Estado español (la decisión de establecer relaciones federales en igualdad u otras fórmulas incluida la separación) ha sido proscrita de la legalidad vigente e histórica, fuera en Monarquía, Dictadura o República.
La libertad democrática para los pueblos encontrará sus cauces a pesar de todas las trabas políticas que se establecen.
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